INTRODUCCION

La civilización no ha dejado de ganar terreno en la búsqueda de mayores libertades. Se afirma que el hombre y la mujer salieron de las cavernas, de un estilo de vida primitivo, rudimentario, a la vida en la urbe, a disfrutar del bien común: servicios públicos, mejores carreteras, calles y avenidas, electricidad, agua potable, el alimento sin sembrar, o la carne sin criar ganado, la atención médica, etc.

“L a ciudad en la historia, según Mumford decepcionará a aquellos que en su libro busquen una confirmación para sus sueños de utopías urbanas. Ya a finales de los años 50 del pasado siglo Mumford constataba, en efecto, que las ciudades del occidente desarrollado habían emprendido un rumbo desbocado hacia la nada, empujando sus límites exteriores sin orden ni concierto, destruyendo la periferia y el ámbito rural y, por tanto, sembrando las semillas de su propia extinción”.
Fuente: https://www.diagonalperiodico.net/culturas/lewis-mumford-ciudades.html...Haz click

Pero con comodidades o sin ellas buscamos tiempo de desarrollarnos y evolucionar en la perfección de nuestro propio gobierno: La Democracia.

Pero no un poder en manos de pocos, sino en las manos de muchos: El pueblo. Una gran masa con una gran necesidad de empleo, riqueza y suficiente alimento. Y en sentido bíblico bien podemos decir ahora, y sin ánimos de gobernar como rey, pero sí con la sabiduría que recibió Salomón de Dios: “Concede, pues, a tu siervo un corazón que entienda para juzgar a tu pueblo y discernir entre lo bueno y lo malo, pues, ¿quién podrá gobernar a este pueblo tuyo tan grande? (1 Reyes 3: 9).

Mas, ese ascenso al poder tiene su doloroso proceso evolutivo debido a las superestructuras de explotación creadas por los antiguos amos que manejaron el `poder para una minoría, y que ahora nos toca enfrentar para ser verdaderamente libres. Cuando el hombre y la mujer reciben y conocen el evangelio de de N.S. Jesucristo se crea por su poder sobrenatural, la historia lo demuestra, el ambiente propicio para que el ser humano se perfeccione...

“Porque él dijo, y fue hecho; él mandó, y existió” (Salmos 33: 9).

...encuentre la verdad y sea definitivamente libre. “Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres” (Juan 8: 32).

Y todo esto está sucediendo ahora ante nuestros propios ojos, es decir, las noticias y los hechos suceden alrededor nuestro. Y resulta inevitable entrar en esa guerra ideológica, espiritual, de rescate de saberes ancestrales. De ser protagonistas y participar positivamente en la perfección de la democracia.
Lo contrario es guardar una actitud y silencio culpables.

 Es en nuestra América Latina, y no en otro lugar, donde surge la interpretación socialista de las ideas libertarías que expuso N.S. Jesucristo y registradas en los cuatro evangelios (Mateo, Marcos, Lucas y Juan). Ello origina  un movimiento de liberación en Colombia liderizado por un exsacerdote jesuita:  Camilo Torres Restrepo (1929-1966), que ahora repercute en toda América y en el mundo.

¿Por qué la gente sigue a hombres y mujeres en su lucha por un nuevo Estado comunal, por nuevas leyes de gobierno popular, ahora en Venezuela? La respuesta se obtiene en la doctrina libertaria de Cristo que por cuanto los “pastores” negociaban en el templo tan libremente en beneficio de sus bolsillos, él se declaró como el Buen Pastor y los demás simples “asalariados”.

Así habló Cristo: “El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas. Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa” (Juan 10: 10-12).

Abundancia es riqueza. Escasez es pobreza. Estos conceptos son tan antiguos como la misma Biblia a la cual todos nos avocamos a buscar la verdad. Pero ahora todos los “predicadores” se esfuerzan por demostrar que saben más de cosas espirituales que de cosas materiales. Como que si producir alimentos y bienestar colectivo fuera el pecado mortal que les impida entrar al cielo. Todo lo contrario ello le abre las puertas según Cristo: "Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras" (Mateo 16: 27).

 Venezuela enfrenta una crisis peor que la guerra de independencia porque no se toma en serio a Simón Bolívar que pensaba y actuaba de acuerdo a una gran verdad: “Revolución sin sangre no es revolución”. Recordemos que a Cristo lo matan y le clavan en su cruz un letrero que decía: “ESTE ES JESÚS, REY DE LOS JUDIOS” (Mateo 27: 37). Los soldados romanos lo aclamaron: “¡SALVE, REY DE LOS JUDIOS!” (Mateo 27: 29). Este Jesús se refiere a su reino cuando habló de Juan el Bautista: "Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos o arrebatan" (Mateo 11: 12).

Cierto. Cristo vino a traernos vida en abundancia, pero ¿qué es abundancia? Un sencillo librito explica lo que es abundancia: "Gran cantidad: haber abundancia de alimentos. 2. Riqueza, bienestar: vivir en la abundancia -Cuerno de la abundancia. Vaso en forma de cuerno lleno de frutas y flores, que simboliza la abundancia y que solía llevar la diosa del mismo nombre. -Teoría de la abundancia. Economía. Teoría según la cual los medios técnicos modernos permiten producir una cantidad de bienes muy superior a los medios de adquisición de los consumidores, circunstancia que hace necesario implantar mecanismos que permitan paliar este desequilibrio." (Diccionario Enciclopédico Larousse 2003).

La “abundancia” no se predica hoy porque los “asalariados” han visto venir al lobo y han huido. Otros han evadido su responsabilidad y se han aliado con los ladrones. En las iglesias “evangélicas” existe un evangelio de la prosperidad, pero solo se maneja el dogma de la Fe. Que si usted deposita grandes ofrendas para evangelizar o construir catedrales, templos o capillas Dios le hará aparecer prosperidad y “abundancia”. Llevar la Biblia y construir templos es la "obra" de ese mal llamado "evangelio". Este "evangelio de la prosperidad" no tiene capacidad de manejar la teoría y práctica de la Economía. Porque le huyen al trabajo socio productivo. Mas ahora cuando en Venezuela se pide entrar en la Guerra Económica para lograr la Soberanía Alimentaria. Acabar con el desempleo, la pobreza y el hambre.

Los cordones de pobreza, barrios sin urbanismos,  surgen hoy como surgieron en la época de la cuarta república. Estos barrios no tienen como ingresar en la batalla por la Soberanía Alimentaria y por ello es imprescindible un plan de salida de la ciudad al campo. Y no son los Consejos Comunales los mejores indicados para manejar la teoría de la ABUNDANCIA, sino  las pequeñas iglesias cristianas.

Si en todo lo anterior podemos estar de acuerdo divulguemos de forma notoria, pública y comunicacional que ninguna iglesia por muy pequeña o ignorada que sea puede enseñar o violar la Constitución de la república Bolivariana de Venezuela. Peor aún, si el Estado venezolano decreta un Estado de emergencia para enfrentar la guerra económica y llama a participar positivamente en la producción de alimentos. Ofrece exoneración de impuestos, créditos para formar aldeas de agricultores, criadores y/o pescadores. Tierras fértiles en comodato y asesorías de peritos y técnicos.

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